Por desgracia no todos nacemos con una genética que nos ponga automáticamente en las pasarelas de París y Milán así que tenemos que trabajar un poco más todos los demás aspectos de nuestra vida que contribuyen a tener una
piel y cabello sanos y bonitos. Como nos repiten hasta la saciedad las modelos con frondosas y saludables melenas en las entrevistas
hay unas pautas claras: tener las horas de sueño básicas, utilizar productos de primera calidad, alimentarse bien y ser constantes en nuestros rituales de belleza.
Aunque desafortunadamente algunas están fuera de nuestro control, hay otras que podemos y debemos controlar. Dormir lo suficiente, dormir bien y descansar adecuadamente son factores que pueden afectar a nuestra salud en general y a la salud (y por tanto belleza) de nuestro cabello en particular. Las alteraciones del sueño afectan a nuestro organismo y el déficit de sueño es un factor altamente estresante. Como ya sabemos el estrés está directamente relacionado con la caída del cabello.
En épocas de estrés como exámenes o situaciones profesionales muy tensas, una enfermedad, problemas sentimentales o un duelo por el fallecimiento de un ser querido el cabello cae y eso además aumenta nuestro estrés.
Los médicos nos explican que, además, hay una estrecha relación entre falta de sueño y el sistema inmunitario, la secreción de hormonas, así como la resistencia física y mental. Es decir, no estamos hablando de un tema frívolo ni mucho menos. Dormir bien es una piedra angular de nuestra salud en muchos aspectos, nuestro cabello es uno de sus reflejos y, como siempre repetimos, un cabello hermoso comienza por ser un cabello sano. Así que no te extrañes nada si nuestro consejo principal de hoy es ¡DUERME! ¿Cuántas horas? Obviamente, eso depende de cada uno hay quien necesita nueve y quien con siete está muy bien pero por lo general, todos los médicos destacan lo crucial de la calidad del sueño.
La almohada, la gran olvidada del mundo del cabello tal vez debería tener más relevancia en tus hábitos cotidianos. Si además quieres cuidar tu cabello y tu rostro con un agradable tacto puedes decir adiós a la almohada de algodón y probar las de seda. Tu rutina de belleza puede incluir, además del lavado y los productos, una almohada. Algunos factores externos pueden afectar a tu melena dañándola, secándola o encrespándola. La almohada, la gran olvidada del mundo del cabello tal vez debería tener más relevancia en tus hábitos cotidianos.
Con sus aminoácidos naturalmente seborreguladores, la seda limita la producción de grasa de tu cabello durante la noche. Sus agentes reparadores e hidratantes nutren el pelo mientras duermes. ¿Sorprendida? ¡No eres la única!
Te recomendamos que pruebes con fundas de seda natural, sin procesado ya que no tiene lo mismos tratamientos químicos que otras telas con las que habitualmente interaccionamos y, de este modo, reduce nuestra exposición a sustancias nocivas. Es un producto hipoalergénico, lo cual siempre es bueno, y por su naturaleza y tacto reducirá la fricción de tu melena. ¿En qué se traduce esto? En una reducción de la caída del cabello y también en una menor aparición de las puntas abiertas. Si aún necesitas más para convencerte pregúntales a Kim y Kourtney Kardashian, que hace tiempo que las usan y están encantadas.
Redacción COSMO
Noticias escritas por el equipo de redacción de COSMO.