El mundo va a seguir estando tan loco como siempre este otoño. Si quieres estar a la última en cuanto a tendencias puedes seguir la
Mercedes Benz Fashion Week de Madrid, o bien puedes apuntarte a una de esas modas absurdas con las que algunos titulares nos sorprenden en ocasiones.
Ya hemos hablado en Cosmo acerca de tendencias poco recomendables como la del
#KylieJennerChallenge, con la que arriesgas la salud de tus labios intentando darles volumen usando el efecto vacío al introducirlos en un vaso de chupito, y ahora te traemos una pequeña
recopilación de las nuevas locuras que siguen jóvenes y no tan jóvenes del mundo por apuntarse al carro de una nueva tendencia.
Repasemos alguna de las nuevas locuras con las que nos han sorprendido este septiembre.
Vestirse con bolsas de plástico. Nueva moda nacida en Taiwan, que consiste simplemente en hacerte un vestido o camiseta con una bolsa de supermercado. Lo que a muchos nos parece una tontería sin sentido ya ha cautivado a miles de jóvenes asiáticos y se está propagando a nuevos territorios. En defensa de esta nueva moda, llamada bagfie, podemos decir al menos que es barata y que ayuda en tareas de reciclaje.
Calzado peludo. Esta tendencia no sale de unos desconocidos que cuelgan sus selfies en Twitter, sino que proviene de las pasarelas y de una firma tan conocida como Gucci.
Su nuevo director creativo recicla pelucas y escobas para crear su nueva línea de zapatos, para que pisemos tan fuerte como el mismísimo Chewbacca de la Guerra de las Galaxias.
Respirar alcohol. Esta tendencia, que comienza por una iniciativa del bar londinense Alcoholic Architecture, consiste en pagar una entrada equivalente a 14 euros y pasar a una sala de luces tenues y música electrónica en la que unos humificadores llenan el ambiente de alcohol vaporizado, que los clientes del bar respiran y se introduce en su torrente sanguíneo de la misma manera que si lo consumieran tradicionalmente, sólo que la sensación de embriaguez les llega un 40% más rápido que si lo consumieran por vía oral. En la sala, en la que sólo se nos permite pasar una hora cómo máximo, la visibilidad es nula, pues una niebla de ginebra lo cubre todo.
Emborracharse con enjuague bucal. Parece que el alcohol está estrechamente relacionado con el concepto de moda absurda. Esta nueva tendencia, la menos recomendable de la tanda que hoy os traemos, lleva a jóvenes de Estados Unidos a beberse el contenido de una botella de enjuague bucal o gel desinfectante para conseguir una sensación de embriaguez. Esta clase de enjuagues suele contener desde un 45% a un 95% de alcohol, por lo que la consecuencia lógica es un aumento en los ingresos en hospitales si tenemos en cuenta que una cerveza rara vez suele superar los 10 grados de alcohol.
El mundo está loco y no hay previsiones de que deje de estarlo pronto. ¿Conoces tú alguna otra moda absurda?
Redacción COSMO
Noticias escritas por el equipo de redacción de COSMO.
