Una noche, Maayan, una adolescente israelí, jugaba con su padre a las cartas, cuando de pronto le surgió una duda: ¿Por qué el Rey tiene más valor que la Reina en el juego?; su padre no supo cómo responder, pero lejos de dejarlo pasar se embarcaron en una aventura juntos: crear la primera baraja de la historia en la que las cartas femeninas tengan el mismo valor que las masculinas. La chica lanzó su interesante proyecto en Indiegogo, al que bautizó como Queeng Playing Cards.
En el nuevo formato creado por Maayan y su padre, tanto las cartas del Rey como las de la Reina, se conocen como ‘cartas Monarca’, y ambas tienen el mismo valor, el mismo que ostentaba sólo la carta del Rey en el juego tradicional. Igualmente encontramos las ‘cartas Duque y Duquesa’ que se corresponden con el valor clásico de las Reinas, y por último las de Jack que pasan a ser las de ‘Príncipe y Princesa’, para terminar con un ‘Comodín femenino’, que pone el broche de oro a esta nueva baraja.
El diseño del mazo no se aleja mucho del tradicional, y ese fue el principal desafío que encontró Maayan y su padre, a la hora de adaptarlo al moderno formato, buscando un equilibrio de elementos. Hay que recordar que la historia de los naipes se remonta al año 1400 después de Cristo, momento en el que surge el mazo de 53 cartas que conocemos y que ahora, por primera vez, cuenta con una versión alternativa, adaptada a los tiempos actuales.
Padre e hija se embarcaron en enero de 2020 en una campaña para recaudar unos diez mil dólares para hacer realidad su idea, hasta la fecha ya llevan más de 200 mil dólares; una cifra muy superior a la esperada y que ha dejado abrumados a sus impulsores dado el éxito y buena acogida de su creación.
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