Una colección que nos sumerge de lleno en el mundo del cine, la pasarela se convierte en el
escenario de Desayuno con Diamantes y las modelos interpretan a la icónica y estilosa Audrey Hepburn.
Cabe destacar la mezcla de
trajes sastre y conjuntos de corte clásico, cuellos altos, abrigos minimalistas, trench como protagonista indiscutible y colores clásicos como el camel y el gris y una espectacular capa gris de corte militar. Estampados de cuadros, tejidos jaspeados, guantes largos de piel y sombreros. El toque lo dan los bolsos con flecos y las magníficas botas over knee .
La parte más femenina y elegante de la colección de
Roberto Verino se abre paso en la pasarela con vestidos y monos muy Hollywood, ensalzando a la mujer. El
rojo se abre paso entre los tonos neutros y el broche final lo ponen el
negro y el dorado, los perfectos aliados de una noche de cocktail.
La transformación de la obra de arte de Givenchy en un mono con accesorios joya y un precioso
cinturón dorado, Plumas y pailletes, joyas y atractivas espaldas adornan de forma discreta las noches de Roberto Verino.
Cabe destacar el cierre del desfile acompañado de la emotiva Moon River con un look negro con tirante de una lazada y pantalones con brillo y la singularidad de un caniche paseándose por la pasarela.
Sofisticación, modernidad y elegancia.
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Redacción COSMO
Noticias escritas por el equipo de redacción de COSMO.
