Primera rabieta. Ha tenido a bien pillársela de camino a la playa, con venga de veraneantes pasando por su lado, asustándose, compadeciéndonos. Y ha rematado la faena en la arena. El resultado: un cabreo rebozado.
Qué majo, estrenarse en estas lides en plenas vacaciones y en público. Ya veo que no le gusta pasar desapercibido…
Espera que lo haga en el supermercado, cuando quiera algo nada sano para comer. ¡Cosas de familia!
¡Jaajaaj! Me ha sonado a «tú te lo has buscado»… ;-D