“Rota. Desde el fondo de mi corazón, lo siento mucho No tengo palabrasâ€. Esas fueron las escasas palabras que pudo escribir Ariana Grande en su Twitter tras el ataque de pánico que sufrió en su camerino del Mánchester Arena cuando fue informada de la terrible explosión que acabó con la vida de 22 personas. La estrella musical canceló temporalmente su gira europea y cogió un jet privado que la llevó de vuelta a su residencia familiar en Boca Ratón (Florida). Desde entonces, la estrella musical se mantuvo en silencio hasta hace poco más de 48 horas que volvió a dar señales de vida en las redes sociales para anunciar la reanudación de su tour y un concierto benéfico en honor de todos los afectados, en el que espera la presencia de muchos artistas.
“Voy a volver a la increÃblemente valiente ciudad de Mánchester para pasar tiempo con mis fans y a ofrecer un concierto a beneficio en honor a las vÃctimas y para reunir dinero para ellos y sus familias. Quiero agradecer a mis colegas músicos y amigos por acercarse y ser parte de nuestra expresión de amor por Manchesterâ€, dijo la artista de 23 años. “Desde el dÃa en que comenzamos con Dangerous Woman Tour, dije que este show, más que nada, tenÃa la intención de ser un espacio seguro para mis fans. Un lugar para que ellos puedan escapar, celebrar, sanar, sentirse seguros y ser ellos mismos. (…) La música se hizo para sanarnos, reunirnos, hacernos felices. Y eso es lo que va a seguir haciendo por nosotros. Vamos a continuar en honor a los que perdimos, a sus seres queridos, a mis fans y a todo el que haya sido afectado por esta tragediaâ€, añadió Ari.
Según la web de la cantante, regresará a los escenarios el próximo 7 de junio para continuar sus actuaciones en otras ciudades europeas, como Lisboa, Barcelona, Roma y TurÃn, para más tarde viajar a América Latina y Asia hasta el 2 de septiembre. Sin embargo, sus acérrimos seguidores en Bélgica, Polonia y Alemania se quedarán este año con las ganas de verla en directo. Tampoco se sabe la fecha de este show solidario, aunque podrÃa ser inminente, otro quebradero de cabeza para las autoridades británicas que tienen sitiada la segunda capital británica para evitar un nuevo ataque.