Las relaciones de pareja son una montaña rusa. Tras un inicio en el que todo parece ser de color de rosa y en el que os convertís en inseparables, aparecerán las primeras tensiones.
Discutir, siempre desde el respeto y la educación, es algo muy sano para la vida en pareja. Dejamos claro nuestro punto y aclaramos cuáles son los límites que no queremos atravesar, haciendo entender a nuestra pareja cómo somos realmente.
¿Pero qué pasa cuando el motivo de la disputa es algo que hemos dicho inconscientemente? Todos tenemos tics y manías de las que no nos damos cuenta, y que pueden minar poco a poco la paciencia de nuestro ser amado.
La escritora Brittany Wong ha realizado un decálogo de esas frases que debemos evitar decir para no acabar con la armonía de nuestra relación.
1. Siempres y nuncas.
Evita ser tajante en tus declaraciones. La conversación dejará de ser productiva si somos injustos con nuestra pareja, y lo único que conseguiremos es que se ponga a la defensiva. Ejemplo: en lugar de decir "nunca salimos juntos" prueba a decir "me gustaría que saliéramos más juntos".
2. ¿Desde cuándo te gusta...? Cuando nuestra pareja desarrolla un nuevo interés sin contar con nosotros es normal que nos pongamos a la defensiva, pero debemos pensar que no tiene porque existir un motivo oculto en esta nueva afición. Debemos aceptar la novedad mostrando la misma ilusión que refleja nuestra pareja y no interrogar a la otra persona en busca de señales inexistentes.
3. ¡No exageres! Esta frase suele aparecer con frecuencia en nuestras discusiones. Afirmar que nuestra pareja está actuando con poca cordura o que necesita calmarse sólo conseguirá lo contrario de lo que se pretende. Intenta ponerte en su situación y averigua por qué está actuando de esta manera.
4. No te estaba escuchando. A todos se nos ha ido el santo al cielo en ciertas conversaciones con nuestra media naranja. Esta frase puede dañar gravemente la autoestima de la otra persona y la confianza que en ti ha depositado. Si no tienes cabeza para entrar en una conversación, déjalo claro desde un principio.
5. Ya te lo dije. Por mucho que le hayas advertido del posible resultado de una decisión, el "te lo dije" es una de las maneras más rápidas de alejar a nuestra pareja de nosotros. Empatiza con la otra persona y trata de entender por qué ha tomado las decisiones que ha tomado.
6. Esta noche no. Obviamente, esto no quiere decir que debamos decir "sí" cada vez que él propone sexo. Pero lo que sí tenemos que entender es que es mejor expresar la verdadera razón por la que no queremos intimar que simplemente negarse en rotundo con un contundente no. Ayudémosle a entender.
7. ¿Cuál es tu problema? Por mucho que a veces nos cueste entender ciertas acciones de nuestra pareja, siempre es más recomendable la comprensión a las descalificaciones y el extrañamiento.
8. No te creo. Si sientes que tu pareja te está ocultando algo, dale la oportunidad de explicarse antes de negarte en redondo a fiarte de su palabra. Un "no te creo" temprano puede hacer que la pareja se acabe desvinculando de nosotros. ¿Y si realmente no te está ocultando algo? Con tus dudas podrías llegar al mismo resultado negativo que estás temiendo.
9. Amenazar con la ruptura. Una de las formas definitivas de chantaje emocional. A no ser que estemos totalmente seguras de que os separaréis si las cosas no van como a ti te gustarían,
amenazar con romper acabará por desgastar totalmente una relación que terminará siendo vista como insostenible.
10. Si me quisieras de verdad... Otro de los chantajes emocionales más duros que existen. Nunca debemos usar la culpa como arma, minusvalorando así el amor que la otra persona pueda tener por ti. Acabaremos teniendo no ya una pareja, sino un rehén emocional.
Redacción COSMO
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