Vas a dar el paso más importante de tu vida y, de repente, notas que
te asaltan muchas preguntas que te hacen dudar de lo que estás haciendo… No te preocupes, no te sucede nada raro ni eres diferente al resto de las mujeres que van a dar el sí quiero. Y es que, lo confiesen o no,
todas (o casi todas las novias) se hacen preguntas antes de la boda. ¿Quieres saber cuáles son las más frecuentes? ¡Te lo contamos?
1.-
¿Será el hombre de mi vida?: Aunque es una pregunta que muchas novias se hacen, lo cierto es que la respuesta es más fácil de lo que parece.
Si hasta hace unos días no te cabía ninguna duda de que lo era, la situación no tiene por qué cambiar ahora. Solo los nervios por la boda te hacen pensar así.
Respira hondo y repítete que todo saldrá bien porque, seguramente, así sea.
2.-
¿Estoy preparada para casarme?: El matrimonio es un paso importante, pero lo cierto es que en el momento actual, no supone un gran cambio en la relación para la mayoría de las parejas que ya viven juntas antes de casarse. Por ello,
si hasta hace unos días has estado más que preparada para vivir con tu novio y convivir con él, el matrimonio no tiene por qué cambiar eso. 3.-
¿Cómo afrontaremos la convivencia?: Si ya vivías con tu novio antes de dar el gran paso, la respuesta es fácil: nada cambiará respecto a lo que hacías antes. Si, por el contrario, empiezas una nueva etapa en la que viviréis juntos coincidiendo con la boda, el cambio será mayor.
Nuestro consejo es que no te juzgues muy duramente al principio. Adaptarse a la convivencia con el otro lleva su tiempo
y es normal que los primeros días sean difíciles y discutáis por más cosas que lo normal. Sin embargo, esa fase pasará y os daréis cuenta de que convivir juntos es un paso muy enriquecedor para vosotros que os ayudará a ser más felices como pareja.
4.-
¿Discutiremos más cuando nos casemos?: No. Discutiréis lo mismo que antes de estar casados. Si sois una pareja que tiende a discutir, el matrimonio no lo cambiará y si los dos sois tranquilos y discutís poco, el sí quiero tampoco modificará ese aspecto de vuestro carácter.
5.-
¿Caeremos en la rutina?: Sí, pero eso no debe preocuparte. La rutina es
una fase por la que, tarde o temprano pasan todas las parejas y solo supone una etapa diferente en la relación. Ahora bien, vosotros sois los únicos que podéis definir cuál es vuestra rutina y los que, con sorpresas y detalles, podéis trabajar para romperla.
6.-
¿Y los malos momentos?: Los habrá, como en todas las parejas, pero con amor, respeto y mucho de vuestra parte, no os costará superarlos.
7.-
Si llegan los niños… ¿cambiará nuestra relación?: Todos los padres y madres te dirán que sí, pero que el cambio, tras los primeros momentos de “ajuste” a la nueva situación, es para bien. Lo único que debes tener claro es si ambos queréis tener familia y si, en tu caso, estás convencida de que quieres que sea él el padre de tus hijos.
8.-
¿Hay alguna forma de saber si nuestro matrimonio tendrá éxito?: Desgraciadamente,
no hay una fórmula mágica que te diga si dentro de 20 años seguiréis o no juntos. Lo único de lo que puedes
estar segura es que el matrimonio es algo que debéis cultivar los dos día a día y que juntos
tendréis que estar al lado uno del otro en los buenos momentos y en los malos si queréis que funcione.
9.-
¿Y si alguna vez me gusta otra persona?: Una de las enseñanzas que siempre se extraen de matrimonios que llevan muchos años juntos y felices es que
las tentaciones no desaparecen una vez que te has casado. A lo largo de los años, podrás cruzarte con otros hombres que te resulten atractivos, del mismo modo que tu pareja se puede encontrar con mujeres que lo atraigan. Lo fundamental es que ambos tengáis claro que os queréis y que lo que tenéis juntos es más valioso que cualquier atracción esporádica por otra persona.
10.-
¿Cuál es la clave para un matrimonio feliz?: Aunque no hay una receta para el éxito, sí es cierto que las parejas que llevan muchos años casadas coinciden en que la
paciencia, el respeto, la constancia, el amor y la empatía son fundamentales en un matrimonio. Y es que, si nos sois capaces de poneros en el lugar del otro y de ceder en algunas de las cuestiones que considere importantes, probablemente vuestro matrimonio esté condenado al fracaso. Del mismo modo, la boda no es el final, sino el principio de una nueva etapa en la que el respeto, la constancia y la paciencia serán
claves para resolver los problemas que puedan presentarse y cultivar vuestro amor día a día.
Y es que, las dudas son más frecuentes de lo que todas pensamos antes de dar el sí quiero por la magnitud del paso que vamos a dar, pero lo cierto es que si tienes claro que tu pareja es la persona con la que quieres pasar el resto de tu vida, no hay razón para que el vuestro no sea un ejemplo de matrimonio de éxito en el futuro.
¡Relaja tu mente y disfruta de tu gran día!
Texto vía:
ZankyouFotos: Kiwo Estudio Creativo; People producciones; Camera Mirage; Pablo Laguía.
Redacción COSMO
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