La actriz cree que la maternidad supera cualquier satisfacción que puedan reportar los éxitos profesionales
Desde el punto de vista de la actriz Sigourney Weaver ningún éxito profesional puede compararse a la dicha que proporciona ser madre, por lo que compadece a todas sus compañeras de profesión que no han tenido la oportunidad de experimentar las bondades de la maternidad en primera persona, algo que ella conoce muy bien gracias a su papel de madre de Charlotte (24), fruto de su matrimonio con el director de cine y teatro Jim Simpson.
"Me dan pena las mujeres como Katherine Hepburn. Puede que ganara cuatro Óscar, pero nunca supo qué es ser madre. Lo encuentro muy triste", reveló la intérprete a la revista HELLO!
Pero pese a ser ella misma una madre trabajadora, Sigourney cree firmemente que los directivos de Hollywood no deberían hacer concesiones a las mujeres con hijos, ya que la ayuda para conciliar la vida personal y profesional debe proceder del entorno cercano de cada persona y no de sus jefes.
"No es responsabilidad de Hollywood preocuparse por la elección de una mujer de ser madre.
Yo tengo un marido maravilloso que me ayudó mucho cuando estaba trabajando. Creo que el trabajo en equipo es la clave para mantener una carrera en Hollywood", declaró.
En la actualidad, y a pesar de estar a punto de cumplir 65 años, una etapa difícil para las mujeres en la meca del cine, Sigourney se siente muy a gusto en su piel y no tiene ningún miedo a envejecer.
"Estoy sana y feliz. Tengo ganas de cumplir años. Los 65 no significan el fin de la vida, se trata simplemente de otro emocionante capítulo", señaló.
