El intérprete acabó viéndose arrastrado al mundo de la interpretación más por casualidad que por su propia decisión
Pese a pertenecer a una de las dinastías más famosas de la industria cinematográfica mexicana, Gael García Bernal nunca se planteó seguir la tradición familiar dedicándose al mundo de la interpretación, una profesión en la que acabaría aterrizando más por casualidad que por voluntad propia.
"Hay un refrán que dice que si vienes de una familia de ferreteros, acabarás siendo pescador o carpintero. En mi caso, quería hacer cualquier otra cosa que no fuese actuar. Pero las aguas acabaron llevándome inevitablemente en esta dirección", confesó Gael a la revista Screen Magazine.
Así que no es de extrañar que el intérprete afronte cada uno de los éxitos de su extensa carrera como un preciado regalo, teniendo en cuenta que jamás pensó que podría ganarse la vida delante de las cámaras. De hecho, tras filmar la célebre película 'Amores Perros' del cineasta Alejandro González Iñárritu, Gael se apresuró a pedir una copia de la cinta empujado por su convicción de que su trabajo jamás llegaría a los cines de su tierra natal.
"Cuando terminamos de rodar la última escena de 'Amores Perros', les pregunté a los productores si podían darme una copia en VHS para poder enseñársela a mi familia, porque estaba seguro de que si no no podrían verla", añadió.
Aunque en la actualidad disfruta de un gran momento a nivel profesional, tras ser homenajeado con una de las estatuillas del Festival de Cine de Sarajevo (Bosnia) por su trayectoria, en el plano sentimental Gael podría estar atravesando un delicado momento en su relación con la también actriz Dolores Fonzi -madre de sus hijos Lázaro y Libertad-, según informaba recientemente el portal Paparazzi.
