Los desfiles de
Ágatha Ruiz de la Prada siempre congregan multitudes. La sala está llena de positividad, familias y niños. En el escenario, percheros con ropa,
corazones y mucho colorido.
En la colección cabe destacar la espectacular
puesta en escena: modelos con pelucas fucsias acompañadas de pop español de los 80, una combinación sensacional.
Pudimos ver una amplia paleta de colores, como protagonista la lycra y el color ya conocido como “azul Ágatha”, estampados que ya hemos visto en otras ocasiones (corazones, margaritas…) que se reeditan de nuevo esta temporada otoño/invierno en forma de vestidos y faldas largas y las llamativas medias de colores con estampados muy Ágatha.
El volumen cobra fuerza de tal modo que vemos margaritas e incluso cerezas que cobran vida y salen de los diseños.
Un desfile el de
Ágatha Ruiz de la Prada divertido en un ambiente distendido y lleno de diversión y fantasía como no hay otro igual en la semana de la moda madrileña.
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Redacción COSMO
Noticias escritas por el equipo de redacción de COSMO.