En verano debemos extremar los cuidados del cabello y la piel no solo de la exposición al sol sino también de los efectos del agua de mar y piscina sobre él. Para mantener en perfecto estado el cabello debes ser constante con los
tres elementos principales de la belleza capilar: proteger, limpiar y nutrir.
Proteger
Del mismo modo que las cremas solares debemos aplicarlas antes de exponernos al sol, el cabello se protege también antes de salir de casa. Aplicaremos un producto protector ya sea en gel, espuma o spray. Y según avance el día lo repetiremos según resulte necesario en función de las actividades que hagamos.
Limpiar
Nunca olvides, después de un baño en la playa o la piscina, enjuagar el pelo con agua dulce abundante antes de proceder a lavarlo. Tanto o más importante que aplicar el mejor champú para lavar el cabello es asegurarnos de que retiramos bien antes el cloro o salitre. Esto no solo es importante antes del lavado sino también cada vez que sales de la piscina o del mar. De este modo esos minutos u horas hasta que laves tu cabello no se convertirán en tiempo de daños para tu melena.
Nutrir
En verano siempre escuchamos el consejo de beber abundante agua para asegurarnos de que estar bien hidratados en todo momento. Pues bien, tu cabello también necesita beber y alimentarse bien para estar sano y bonito en verano. Utiliza acondicionadores tras el lavado y combinados con la mascarilla nutritiva semanal. En invierno van muy bien pero en verano se convierten en imprescindibles.
El tip de Sara Ruesga: Protege el cabello contra los efectos dañinos de las radiaciones UVA, UVB e IR, del agua salada y del cloro de las piscinas utilizando un producto con pantalla protectora. Creará una barrera que impedirá que tu cabello se dañe. La mejor medicina es la prevención.
Redacción COSMO
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