El cantante se pasó siete años de su infancia viajando todos los fines de semana de Estados Unidos a México, donde vivió su padre hasta su muerte tras ser deportado
La vida del cantante Luis Coronel, uno de los artistas más prometedores de la música regional mexicana, antes de saltar a la fama no fue precisamente fácil. Además de vivir durante seis meses en un gimnasio mientras trataba de labrarse una carrera como boxeador, un plan que aparcó tras convertirse en una sensación en las redes sociales gracias a los vídeos que publicaba cantando, el joven de 20 años pasó la mitad de su infancia sin su padre después de que este fuera deportado.
"Mi padre fue deportado y tuve que crecer sin él durante siete o ocho años, viéndole solo los fines de semana. Le arrestaron por un cargo de conducción bajo la influencia del alcohol. No llevaba consigo su permiso, así que le detuvieron y pasó dos años en la cárcel.
Cuando salió, le prohibieron regresar a Estados Unidos en diez años. Fue muy duro. Cada fin de semana conducíamos durante una hora para cruzar la frontera y verle, y después regresábamos", explica el joven intérprete, nacido en Arizona (Estados Unidos) de padres mexicanos, en una entrevista a Billboard.
Desgraciadamente, la historia de Coronel no tiene un final feliz, ya que su padre falleció tras ser atropellado por un coche sin poder llegar a cumplir su sueño de reunirse con su familia en Estados Unidos.
"Murió cuando yo tenía 14 años, y esa misma frontera que él había querido cruzar para darnos una vida mejor finalmente consiguió separarnos".
El cantante ni siquiera tuvo la oportunidad de acudir al funeral, aunque su madre sí se arriesgó a viajar hasta su país natal para despedirse de él sin tener la certeza de que le permitirían entrar de nuevo en Estados Unidos a su vuelta.
"Mi madre se fue a México, sin papeles y sin saber si iba a poder regresar. Esa noche, mi hermana y yo nos fuimos a casa solos. Pero por increíble que parezca, mi madre pudo volver", recuerda.
Ahora Luis ha tomado la decisión de hablar por primera vez en profundidad de su trayectoria vital para animar a todos sus compatriotas a ejercer su derecho a voto en las próximas elecciones e impedir que el candidato republicano Donald Trump llegue a la Casa Blanca.
"Para mí, el votar está estrechamente ligado con la inmigración, con las fronteras. No quiero que alguien como Donald Trump sea presidente, y lo digo alto y claro, porque estar separado de tu familia por una frontera no provoca más que tristeza y dolor", afirma.
