Se puede estar loco de amor, pero literalmente. En términos psicológicos a este estado se le conoce como ‘
limerencia’ y son cada vez más las personas que pasan por este estado de locura. Seguramente tú seas una de ellas, y es que el ‘estar loco de amor’ y el estar enamorado son cosas muy diferentes. A veces
los límites entre el amor y la obsesión se confunden y el enamoramiento nos puede llevar a límites que rebasan actitudes sanas y comienzan a convertirse en una especie de adicción.
La limerencia es un estado emocional y cognitivo que hacen que sintamos un intenso deseo hacia alguien, y ese deseo se acaba traduciendo en comportamientos y actitudes que rozan la locura, que puede terminar haciéndonos mucho daño. ¿Quieres saber cuáles son los síntomas? Te los contamos:
Miedo al rechazo
Sentimos continuamente y de manera irracional que nuestra pareja nos va a dejar en cualquier momento, incluso llegamos a pensar que no nos quiere lo suficiente.
Este pensamiento nace de nuestra inseguridad y es uno de los síntomas más comunes.
Pensamientos obsesivos
Aunque creamos que pensar en la otra persona todo el día es algo bonito, pero cuando estos pensamientos se hacen demasiado recurrentes y pasan a ser obsesivos, es cuando tenemos que empezar a preocuparnos.
Idealización
Está claro que si estamos con alguien es porque vemos muchas virtudes en la otra persona y nos encantan pero el problema viene cuando tendemos a sobredimensionar esas virtudes, esto nos hace ser más duros con nosotros mismos, minando nuestra autoestima y haciendo que veamos la realidad distorsionada.
Celos absurdos
Todos estos pensamientos obsesivos e inseguridades desembocan en celos absurdos y muchas veces son los celos mismos los que conducen a la relación al fracaso absoluto.
Si te sientes identificado/a con algunos de estos síntomas, sentimos decirte que estas ‘loco/a de amor’ y que tienes un problema con el que debes empezar a lidiar desde ya mismo. Estate alerta porque es posible que lo que empezó siendo un enamoramiento normal y corriente, se esté convirtiendo en una relación insana, tan insana que nos puede llegar a hacer mucho daño.
Cuando una relación es sana y el amor es correspondido no son necesarios ni los celos, ni las inseguridades ni los pensamientos obsesivos. Lo importante es que nuestra relación esté basada en el respeto, el cariño y el amor mutuo.
Redacción COSMO
Noticias escritas por el equipo de redacción de COSMO.